El domingo 26 de octubre más de 36 millones de argentinos debían concurrir a las urnas para elegir diputados y senadores nacionales, y en distintas provincias renovar cargos locales. Para este proceso, según la Cámara Nacional Electoral (CNE) y la Dirección Nacional Electoral (DINE), fueron habilitados 17.398 locales e instaladas 109.046 mesas. Además, este proceso marcó el debut de la Boleta Única de Papel (BUP), una modalidad que introduce cambios en la emisión y conteo de los votos[1]. Sin embargo, el nivel de participación (apenas 67,92%) fue el más bajo de todas las elecciones en la última década.
Votación nacional y local
Ahora bien, antes de analizar el resultado electoral nacional, es importante tener claro qué se votaba en estas elecciones legislativas. En principio, cada provincia renovó bancas en la Cámara de Diputados. Asimismo, las provincias de CABA, Tierra del Fuego, Santiago del Estero, Salta, Río Negro, Neuquén, Entre Ríos y Chaco, también eligieron senadores nacionales. Por último, muchos distritos sumaron elecciones provinciales para renovar legisladores locales, intendentes o concejales, de acuerdo a su propio cronograma electoral.
Los resultados nacionales
En líneas generales, podríamos decir que los candidatos del partido de gobierno (La Libertad Avanza), sumaron casi el 41% de los votos en las elecciones para renovar la mitad de la Cámara de Diputados y un tercio del Senado. Así, el partido del presidente Javier Milei se convirtió en la fuerza política más votada en el país y fortalecerá su bancada parlamentaria a partir de diciembre, cuando empiece la segunda mitad del mandato presidencial. A su turno, la segunda fuerza fue el peronismo, con casi 32% de los votos bajo las banderas de Fuerza Patria. La tercera, con 7,13% de los votos, fue la alianza Provincias Unidas, una agrupación conformada por 6 gobernadores que buscan romper la polarización política entre oficialismo y peronismo.
En la Cámara de Diputados el peronismo tendrá 99 bancas frente a las 80 de La Libertad Avanza, 24 del PRO, 8 de Provincias Unidas, y 46 de otras agrupaciones. En la Cámara de Senadores el peronismo tendrá 28 curules frente a los 18 de La Libertad Avanza, 10 de la UCR, 6 del PRO y 10 de otros partidos, respectivamente.
Como podemos apreciar el oficialismo no tendrá mayoría propia en ninguna de las cámaras, pero tendrá la posibilidad real de defender la agenda del gobierno en el Parlamento, por lo que será fundamental que La Libertad Avanza busque acuerdos con otras fuerzas políticas (entiéndase todas menos el peronismo de Fuerza Patria) para impulsar las reformas que hasta el momento no ha podido aprobar por el veto de la oposición. Es más, con esta nueva configuración la bancada oficialista en el Parlamento podrá defender los vetos presidenciales que el Poder Ejecutivo emita con respecto a iniciativas legislativas que la oposición logre aprobar en ambas cámaras, de ser el caso.
La palabra de los protagonistas
Ahora bien, luego de conocidos los resultados, Milei subió al escenario en la sede de su coalición para pronunciar un discurso triunfalista tras su categórica victoria en este proceso. Milei empezó diciendo lo siguiente: “Deseo darles las gracias a todos los argentinos por esta nueva elección, por este nuevo acto eleccionario y por la maravillosa elección que se hizo, estrenando un nuevo sistema de votación, que es la Boleta Única de Papel. En particular, quiero agradecerles a todos aquellos que siguieron abrazando y apoyando las ideas de la libertad para hacer grande la Argentina nuevamente”.
Luego, Milei parafraseando uno de sus últimos spots dijo: “Si vieras qué linda que está la Argentina. Y qué lindo le queda el violeta. Hoy claramente ha sido un día histórico para la Argentina. El pueblo argentino decidió dejar atrás cien años de decadencia y persistir en el camino de la libertad, el progreso y el crecimiento. En definitiva, los argentinos mostraron que no quieren volver al modelo del fracaso; al modelo de la inflación; al modelo de la emisión monetaria; al modelo del Estado inútil; al modelo de la inseguridad. Los argentinos le dijeron basta al populismo. Populismo nunca más”.
Por su parte, Axel Kicillof, gobernador de Buenos Aires y uno de los líderes de la oposición peronista, dijo sobre el discurso del presidente lo siguiente: "Se equivoca Milei y su gobierno si festejan este resultado electoral, donde 6 de cada 10 argentinos han dicho que no están de acuerdo con el modelo que propone". Además, sobre el auxilio económico que Milei recibió de parte de Donald Trump, presidente de Estados Unidos, criticó duramente al gobierno en los siguientes términos: "Ni el gobierno norteamericano ni JP Morgan son sociedades de beneficencia: si vinieron a la Argentina no es para otra cosa que para llevarse un lucro y poner en riesgo nuestros recursos", afirmó categóricamente.
¿Por qué razones ganó La Libertad Avanza?
La victoria contundente de Milei ha sido inesperada por los sucesos presentados durante desarrollo del proceso electoral. Recordemos que a poco tiempo de asumir el gobierno los escándalos de corrupción (como el oscuro episodio de lanzamiento de criptomonedas que promovió Milei generando varias denuncias judiciales), aparecieron afectando al círculo más íntimo del presidente (como el caso de los audios de la corrupción que vinculaban a su hermana Karina Milei). Estos escándalos tuvieron su cenit hace unas semanas con la renuncia del principal candidato oficialista a diputado por la provincia de Buenos Aires, por supuestos vínculos con un empresario acusado de narcotráfico en Estados Unidos.
A pesar de todo ello, La Libertad Avanza ganó también en esa populosa provincia, reconocida históricamente como el bastión del peronismo, que en septiembre se había impuesto por 13 puntos en elecciones locales, por lo que diversos analistas indican que el gobierno recibió el domingo un respaldo fundamental a su programa, como afirmó el propio Milei. Es como si los electores hubieran decidido mantener el crédito abierto al cambio de modelo de la economía, que es puntualmente lo que propuso Milei desde la campaña presidencial.
Ahora, sobre las razones que explican el triunfo de Milei y la derrota del peronismo, me animo a decir que más allá de los aciertos de marketing político/electoral del gobierno, fueron los errores cometidos por la oposición los que terminaron inclinando la balanza de manera decisiva a favor del oficialismo.
Primero, la oposición se equivocó cuando decidió que buena parte de sus candidatos fueran personas reconocidas como “caras viejas” de la política argentina. Un error que le costó caro al peronismo, sobre todo teniendo en cuenta que en las últimas elecciones presidenciales los argentinos respaldaron mayoritariamente al candidato -hoy presidente Milei- que ofrecía acabar justamente con esa “vieja casta política”. Ese yerro le permitió al oficialismo, pese a cargar con el desgaste propio de dos años de gestión, volver a presentarse como la opción del cambio, incluso apelando a candidatos muy poco conocidos.
Segundo, los electores apreciaron que más allá de que la oposición se haya opuesto -durante estos dos años- a las medidas del gobierno que afectan a los sectores más vulnerables de la sociedad argentina, lo cierto es que la lista parlamentaria peronista Fuerza Patria fue incapaz de presentar una propuesta legislativa clara en estas elecciones, creyendo que capitalizando el desgate del gobierno bastaría para ganar la elección. En otras palabras, en un contexto político, social y económico complejo que presenta una serie de problemas, era fundamental que la oposición ofrezca un camino claro y responsable para salir de la crisis a los argentinos, algo que como hemos indicado jamás ocurrió.
Tercero, la oposición peronista olvidó que hoy Argentina tiene un padrón electoral joven. Hoy la mitad de los votantes tiene menos de 40 años. Es decir, se trata de ese sector que votó por Milei para presidente (porque pedía a gritos un cambio) y que respalda las medidas de gobierno (incluso los ajustes económicos) porque entiende que es la única manera de resolver los problemas generados por los últimos gobiernos (varios de sello peronista). A ese sector la oposición no solo no le planteó propuestas concretas para atender las necesidades del día a día, sino que además le ofreció indirectamente “volver al pasado” al presentar candidatos identificados con esa vieja clase política a la que ellos repudian. En suma, como lo explica la politóloga Goyburu: "Prendió bastante fuerte la idea de no sé qué viene después y la estoy pasando mal hoy, pero sé que al pasado no quiero volver'".
Lo que se viene
Pero más allá de la clara victoria de La Libertad Avanza en estas Elecciones Legislativas, quiero destacar lo que el presidente Milei ha dicho sobre el reto que como gobierno asumirá a partir del 10 de diciembre: “El rol del nuevo Congreso será fundamental para asegurar este cambio de rumbo, pasamos a contar con 101 diputados en vez de 37; y en el Senado pasamos de 6 senadores a 20 senadores. Tendremos la oportunidad de tener el Congreso más reformista de la historia argentina”.
Hago esta precisión ya que, al no contar con una mayoría propia en las cámaras, el presidente Milei deberá moderar el discurso que ha tenido desde el inicio de su mandato, lleno de insultos a opositores y renuente a negociar pactos de convivencia y gobernabilidad. Como refieren diversos analistas, sentar las bases para la construcción de una nueva Argentina supone la aprobación de leyes que exigen amplias mayorías. En esa línea, todos los partidos deben dejar de lado sus intereses particulares y ponerse al servicio del país. Sin embargo, será el partido de gobierno el responsable de liderar y sacar adelante ese esfuerzo. Por el bien de los argentinos esperemos que así sea.
[1] ¿En qué consiste la Boleta Única de Papel? A cada elector se le entrega una única boleta firmada por la autoridad de mesa, junto a un lapicero indeleble. En la cabina de votación, el votante debe señalar su preferencia en la casilla correspondiente para cada categoría, pudiendo elegir sólo una opción por cargo.