Por: Abraham Fudrini
Analista Internacional
El martes 1 de octubre por la noche Irán disparó alrededor de 150 misiles crucero y drones contra Israel, algunos de los cuales impactaron su territorio. Estos misiles demoran 2 horas para recorrer los 1,600 kilómetros que separan a los dos países. No fueron misiles balísticos que la misma distancia la recorren en 12 minutos.
Fue el segundo ataque iraní contra Israel, el primero fue el 13 de abril de este año. Según el Ejército israelí, esa vez Irán disparó sus misiles contra el país a las 19:30 hora local.
Este enfrentamiento entre Irán e Israel, se originó cuando las Fuerzas de Defensa de Israel realizó un ataque aéreo contra el consulado de la embajada de Irán en Damasco (Siria) el 1 de abril de 2024, donde murieron 16 personas, entre ellas Mohammad Reza Zahedi general de brigada miembro de la Fuerza Quds de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica y otros 7 oficiales.
Faisal Mekdad, ministro de relaciones exteriores de Siria calificó el bombardeo israelí como un extremo ataque terrorista y su homólogo de Irán, Hossein Amir-Abdollahian, dijo que fue una violación de los convenios internacionales.
Simultáneamente el portavoz militar israelí afirmó que el edificio no es ni un consulado ni una embajada, sino un edificio militar de las fuerzas Quds con apariencia de estructura civil en Damasco. Israel dijo que un ataque de represalia por parte de Irán provocaría una respuesta contundente de Israel.
El contexto de este bombardeo se ubica en medio de la guerra de Israel contra Hamas de Gaza y Hezbolá de Líbano, ambos grupos terroristas son apoyados por Irán con armas, logística y financiamiento.
Irán prometió venganza por este ataque y efectivamente el 13 de abril del mismo año lanzó cientos de misiles y drones dirigidas hacia las bases militares de Israel desde donde se atacó al consulado iraní, ataque que no causó muertes ni heridos pues su llamada Cúpula de Hierro, destruyó a casi todos los 350 misiles en el aire.
En mi artículo anterior publicado por la revista Nueva Claridad dije que “guerra avisada no mata gente”, más aún porque los objetivos solo fueron las bases militares israelíes, no la población y porque los misiles crucero y los drones demoraron en llegar hasta el territorio israelí.
El martes 1 de octubre de 2024 fue la segunda vez que el ataque de Irán se hizo desde su territorio nacional, cosa que no había sucedido desde seis meses antes de su primer ataque. Durante un año de enfrentamientos en el Medio Oriente (7 de octubre de 2023 a 07 de octubre de 2024), los ataques de Irán habían sido indirectos, a través de diferentes grupos terroristas como Hamas de Gaza, Hezbolá de Líbano, Hutíes de Yemen y otros más.
Aparentemente esta nueva situación donde Irán ataca desde su territorio, podría pensarse como un escalonamiento de la guerra en Medio Oriente, me parece que no será así ya que ambos ataques fueron con misiles de crucero y drones que dieron tiempo para que la Cúpula de Hierro de Israel anulase esos ataques y la cantidad de pérdida de vida o heridos fue cuantitativamente insignificante, más aún después que esta segunda vez, Irán señaló que no se estaba atacando a la población sino a las bases militares de Israel.
Si el ataque de Irán hubiera afectado seriamente la infraestructura con considerable cantidad de muertos y heridos, se sabe que Israel reaccionaría atacando sus edificios nucleares y sus instalaciones petroleras. Por esta razón considero que la guerra no tendrá una escalada que llevaría a la mayor potencia armada que tiene Israel, más el apoyo seguro de los EE.UU, a atacar con fuerza contundente el territorio iraní.
No se debe olvidar que desde hace un año (7 de octubre de 2023) cuando el grupo terrorista Hamas, apoyado con armas, logística y financiamiento, atacó cobardemente a Israel; Irán ha venido pregonando y amenazando que intervendrá directamente, sin embargo no lo ha hecho con contundencia hasta hoy y solo se ha dedicado a apoyar a grupos terroristas ubicados en el Medio Oriente para que ataquen a Israel. Los ataques realizados desde Irán, el 13 de abril y el 1 de octubre de 2024, han sido tímidos y no han afectado mayormente al territorio israelí debido a que dieron tiempo para que Israel prepare y accione su escudo de hierro contra los ataques de misiles crucero y drones.
Se conoce la fortaleza del equipamiento, cohesión, experiencia y preparación militar del personal del ejército de Irán, pero también se sabe que es mucho mayor el poder y la sofisticación tecnológica de las fuerzas armadas de Israel y su aliado permanente: los EE.UU.
Irán tiene un territorio de 1’745.150 Km2, con una población de 84’841.000 habitantes, mientras que Israel tiene una superficie de 22,145 Km2, con una población de 10 millones de habitantes. Es decir Irán siendo territorialmente casi 79 veces más grande en superficie y teniendo 8 veces y media más población que Israel, solo se ha dedicado a amenazar o atarantar a Israel que bélicamente está en capacidad para destruir sus centros nucleares y sus plantas petroleras, que son razones de peso que Irán sabe que podrían hacerse realidad si es que osa dañar seriamente a Israel.