Los Podridos han hecho y hacen todo lo posible
para que este país sea una charca
Jorge Basadre Grohmann
Jorge Basadre escribió…”Los Podridos, han prostituido y prostituyen palabras, conceptos hechos e instituciones al servicio de sus medros, de sus granjerías, de sus instintos y de sus apasionamientos”.
Si alguien pudiera ganar largamente el concurso de “los podridos”, ese es –sin ninguna duda- Martín Vizcarra Cornejo. Vizcarra presidió una de las etapas de mayor degradación moral de nuestra historia republicana.
Se vacunó él, su esposa y amistades estando en el ejercicio del Poder cuando miles de peruanos morían en sus casas, hospitales y camas UCI por falta de oxígeno y atención. Condujo personalmente el tráfico de influencias para generarle contratos al atrabiliario personaje de Richard “Swing”, y él mismo –también- dirigió el encubrimiento de los delitos.
En el campo del enriquecimiento ilícito con dineros públicos, la lista de colaboradores eficaces que ya han dado su testimonio con pruebas es larga. Vizcarra es uno de los personajes más corruptos que haya conocido la sociedad peruana. En comparación con él, Alejandro Toledo es un aprendiz.
Ese personaje prontuariado, patológicamente mentiroso y moralmente vil, es el que hace dos años hizo un golpe de Estado al cerrar el Parlamento Nacional, iniciando el proceso de degradación institucional, política y social que ahora padecemos.
Ni Castillo ni el neo senderismo en el poder, se hubieran dado sin el golpe de Estado de Vizcarra Cornejo. El inicio de la crisis económica que empieza por las medidas populistas e irresponsables del actual Gobierno, tiene su antecedente en el cierre ilegal del Parlamento por Martín Vizcarra. La contaminación delictiva del JNE, del TC, del Ministerio Público, de la ONPE la inició Vizcarra, y hay serios indicios que su nefasta influencia en esos organismos goza de buena salud.
Vizcarra es la fuente de la ilegitima elección de Castillo y es su condición necesaria.
La pregunta es: A dos años de ese nefasto golpe de Estado, dadas todas las pruebas, confesiones y delaciones...¿por qué oscura razón Martín Vizcarra no está preso en la cárcel?
