El antiaprismo es un cáncer político-cultural de nítida raigambre oligarca, aderezado con componentes ideológicos del Stalinismo autoritario de izquierda, y muchos prejuicios sociales engendrados ante una inmensa masa de peruanos que provenían “de abajo” para participar democráticamente.
Maestros de escuela, dirigentes sindicales, juventudes universitarias, profesionales de diversos campos, intelectuales nacionalistas e integracionistas, todos se juntaban para hacerse presente en la vida política del país. Emergía realmente una “alianza popular” disciplinada, con doctrina, organizada, involucrada con los intereses del pueblo.
Un componente fundamental de la emergía del Aprismo en la vida política peruana (e Indoamericana) fue el tema de la moralidad. Por décadas todos los dirigentes históricos del APRA, incluso los disidentes (como Luis de la Puente Uceda, Arguedas o Alfonso Barrantes) tuvieron siempre la huella de la decencia política que aprendieron del Partido de Haya de la Torre.
Décadas después, el antiaprismo ha logrado una victoria momentánea: ha puesto el sambenito de “corruptos” al Presidente Alan García (su más temido y odiado enemigo) y al partido de la estrella. Esta clara post verdad (definida básicamente como una mentira que socialmente se cree como cierta, a través de la manipulación de las emociones y de los prejuicios a través de los medios de comunicación) es activada principalmente por anti apristas a tiempo completo. Odiadores profesionales. Presupuestófagos por que persiguen el erario nacional. Independientes para robar porque no dependen de ningún ideal, salvo su bolsillo. El cuento es que prácticamente todos estos “moralizadores anti apristas” tienen un amplio prontuario de corrupción y delitos.
Veamos:
- Ollanta Humala y Nadine Heredia, la mentada “pareja presidencial”. No sólo hay testimonios que han recibido dinero de Venezuela, que han pasado de vivir de manera recatada a usar relojes y trajes de una burguesía arribista de mal gusto, sino que ya hay declaraciones y documentos ante un Juez (en Brasil) que fueron sobornados para sus campañas lectorales. Los Gerentes que los están denunciando con pruebas, son de las mismas empresas que ganaron licitaciones amañadas bajo este gobierno de izquierda. A esto hay que añadir aportes de la minería y tala ilegal. Furibundos anti apristas usando el argumento de la “moralidad”. Increíble.
- Alejandro Toledo y Elian Karp: la otra “pareja presidencial” antia aprista. En su caso ya hay pruebas de sobra con dinero no explicado para pagar sus hipotecas, comprar sus nuevas oficinas, fundar empresas of shore en Costa Rica, Maiman y Avi Dan On. La moralidad de esta pareja ha pasado por “secuestros” con prostitutas y droga, entrevistas en estado de ebriedad, sustracción de piezas pre hispánicas sin autorización y negación de la paternidad. Furibundos anti apristas que usaron este recurso de odio político para cubrir sus tropelías.
- César Lévano y Heriberto Benítez: Periodista y político, respectivamente, anti apristas a tiempo completo. Ambos involucrados con las mafias de asesinos del ex Gobernador Regional de Ancash Cesar Álvarez, cuya principal víctima ha sido el Consejero Ezequiel Nolasco, victimado por denunciar la corrupción en su región. También vinculados a Belaunde Lossio, preso por acciones de corrupción en varios Gobiernos Regionales, y financista del esperpento de diario que dirige el primero. Aquí un detalle importante: este diario ha servido para atacar mediáticamente a todos los que se enfrentaron a la corrupción y sus sicarios. Sino, pregúntenle a la hija del asesinado Nolasco. Ambos anti apristas gansteriles y mediáticos. La justicia los espera.
- Álvarez Rodrich y Popy Olivera: El primero, de fujimorista pasó a anti fujimorista sin dejar de ser anti aprista un solo minuto. En todos los medios de comunicación donde tuvo presencia, impulsó con entusiasmo la post verdad que el “aprismo era corrupto”. En paralelo, la organización que presidía, recibía dinero de Odebrecht a manos llenas, cuando ya se habían publicado muchos indicios e investigaciones sobre la corrupción de esas movidas empresariales y Marcelo Odebrech ya estaba preso. Es decir, Rodrich lo hizo sabiendo claramente con quien se asociaba. Ya entendemos ahora el porqué del sentido de muchas de sus columnas. Olivera, que de ser un anti aprista histriónico en la última campaña electoral, ahora está absolutamente callado. Saben por qué: porque el mismo difundió un video donde confiesa que él (Fernando Olivera) logró que la Contraloría no observe a Odebrecht por la ilegal concesión de la carretera interoceánica, cuando era Ministro y dirigente político del Gobierno de Toledo. Tal como lo lee.
François Novaro
Abogado y Analista Político