Punto de Encuentro

Generan la desgracia de los ancianos

Por Roberto Rendón Vásquez

En envejecimiento humano es irreversible.  Todos llegaremos a la ancianidad. Durante nuestra existencia para subsistir hemos trabajado; estábamos en condición de hacerlo, pero al llegar a la vejez nuestras posibilidades de subsistencia devienen de lo que hayamos prevenido logrando formar un fondo dinerario para nuestro sostenimiento en la tercera edad. Nuestra subsistencia dependerá de cuanto tengamos en dicho fondo. Pero si durante nuestra vida “laboral”, no hemos constituido ese fondo o lo malgastamos, nuestra vejez será triste. Conclusión humana: salvaguardar nuestros fondos para vivir dignamente nuestra ancianidad.

La sociedad ha evolucionado. Comprendió el drama de llegar a la ancianidad y constituyo “el derecho jubilatorio” formado con permanentes ahorros de parte de nuestras remuneraciones. Es un fondo (formado con los descuentos más los intereses de ese capital) para obtener como sufragar mensualmente nuestra subsistencia personal y familiar, hasta nuestra muerte. Pero tengamos conciencia: si no hubiéramos formado ese fondo a lo largo de la vida laboral, ya ancianos y sin posibilidades de emplearnos, viviremos la desgracia de la miseria humana. A veces la sociedad ignora ese sufrimiento.

Los aportes de cada trabajador y de todos, a lo largo de sus empleos, hacen un gran fondo solidario para sufragar a los ahora jubilados, pensiones mensuales que les permitan una subsistencia digna. Es un fondo que el Estado y la sociedad deben cuidar y administrar inteligentemente y con honestidad. Por ende, debe combatirse enérgicamente toda intención de mal administrar, destruir y desaparecer el fondo jubilatorio de todos los trabajadores.

Se ha conocido públicamente que hay congresistas  probablemente incentivados por “interesados”  que nuevamente pretenden seguir destruyendo el fondo jubilatorio de los trabajadores. Una vez más “desean” autorizar que los trabajadores puedan retirar parte o la totalidad de su fondo jubilatorio personal hecho en muchos años de trabajo dependiente y subordinado. Saben “esos promotores” que lamentablemente existen trabajadores que desean “tener dinero en mano” sin medir su desgracia cuando sean ancianos y no podrán tener de donde se les pague cada mes una pensión jubilatoria para subsistir. Mientras más pequeño es el fondo, disminuirá  o extinguirán  el monto de su pensión jubilatoria. Si el Congreso aprueba la norma legal que permita un nuevo retiro de fondos jubilatorios, colectiva y personalmente serán los responsables de la miseria de nuestros próximos ancianos sin posibilidad de tener una pensión para subsistir.

¡Alto a la destrucción del fondo jubilatorio!

NOTICIAS MAS LEIDAS